viernes, 10 de enero de 2014

ARAUCANÍA: Los verdaderos objetivos


Nota: Ante la activación del terrorismo y la maniobra para escondeer la continuidad de las acciones, aceptada por las aitoridades, calificando a esas acciones como de origen"anarquistas", estimo conveniente recordar las afirmaciones que contiene este documento, abiertamente sedicioso.
JBA
Carta de Lonko Juan Catrillanca al Estado Chileno
Fuente: www.mapuexpress.net
Como Pueblo Mapuche, representamos en este documento el pensamiento y la demanda de distintos territorios y comunidades de nuestro Meli Wixan Mapu (Territorio Mapuche)
También nos interesa que en el mundo se sepa que entre los Estbados de Chile y Argentina existe un Pueblo Nación llamado Mapuche, un Pueblo Ancestral que surgió hace millones de años y que tiene una matriz cultural propia a diferencia de casi la totalidad de los Estados Nacionales que constituyen un modelo distinto y ajeno para nosotros.
Desde nuestra Cosmovisión, los antepasados construyeron un modo armónico de convivencia y de relación con todos los elementos de la naturaleza, somos directos herederos de una cultura que supo vivir como una gran familia, que esta compuesta por el universo en su totalidad, por el Puel. Lafken.  Willi y Piku Mapu, ademas de las dimensiones Nag Mapu, Minche Mapu y Wenu Mapu (es decir, junto con todo el Territorio Mapuche unido al Cosmos y nuestro sistema de creencias) y nosotros como CHE en y desde la tierra solo somos un integrante más de ese conjunto.Así hemos sabido constituirnos como Pueblo Nación, con una Historia, una Cultura, una Lengua, un Territorio, un Sistema Social, un Sistema Religioso y una Conciencia de Identidad Colectiva.
Somos diferentes, ocupamos este territorio desde mucho antes de la llegada de los españoles, y por ende de la reciente formación del Estado Chileno (200 años atrás); nos hemos desarrollado, complementándonos y siguiendo un ritmo de vida establecido por el cosmos y que nos ha permitido mantener un equilibrio con la naturaleza. Pero desde hace ya más de 500 años, hemos debido luchar permanentemente para poder existir. Parece increíble que exista una sociedad que se autodenomine “desarrollada” y “moderna” que pretenda exterminar todas aquellas formas de vida que represente un respeto a la naturaleza, lo que ha hecho que nuestra historia esté regada por la sangre de nuestros antepasados, quienes lucharon y  entregaron sus vidas para defender nuestra gente y nuestra Tierra.
Hoy junto con seguir luchando, vemos cómo el Estado Chileno impone a nuestro Pueblo y a su propia sociedad, un sistema de vida que desde su formación solo ha provocado, miseria, dolor destrucción. Un sistema en donde todos los valores de solidaridad, respeto y armonía son aniquilados, sembrando el odio y la destrucción; y han acabado con miles de especies animales y vegetales, incluso han cavado con Pueblos y Culturas completas; han contaminado nuestra tierra, el agua, el aire, el suelo hasta asfixiarla.
Todo lo cual, se vuelve más siniestro cuando observamos que solo lo hacen para obtener papeles (a los que llaman dinero) a los cuales han entregado más valor que a sus propias vidas, solo buscan obtener grandes riquezas materiales mediante la destrucción y contaminación del medio ambiente en nuestra tierra.
Por todo lo anterior, defenderemos como sea posible nuestra cultura y los derechos que nos asisten, a través del ejercicio de la autonomía y autodeterminación como Pueblo, como derechos hoy consagrados en la legislación internacional. Por lo que exigimos a las máximas autoridades actuales del Estado Chileno que se respete este derecho fundamental, el que nuestro Pueblo ejerció en el pasado, primero con la corona española luego con el propio Estado Chileno, a modo de ejemplo. Recordaremos que en el Parlamento General de Tapihue celebrado el 7 de enero de 1825 entre el Estado Chileno y el Pueblo Mapuche, se estableció en su artículo Nº19 lo siguiente:
“Haciendo memoria de los robos escandalosos que antiguamente se hacían de una y otra parte, queda desde luego establecido, que el chileno que pase a robar a la Tierra, y sea aprehendido, será castigado por el cacique bajo cuyo poder cayere; así como lo será con arreglo a las leyes del país el natural que se pillase en robos de este lado del Bío Bío, que es la línea divisoria de estos nuevos aliados hermanos.”
En virtud de esto y mucho más, es que como Pueblo Mapuche no buscamos conversar con ninguna figura artificial del Estado como la de un “Comisionado de Asuntos Indígenas” que en nada a aportado a dialogo verdadero en el último tiempo, más bien, reiteramos nuestras demandas (tantas veces no escuchadas) directamente a la Jefa del Estado, la actual presidenta de Chile. Lo cual debe suponer el retiro inmediato de la propuesta de Reconocimiento Constitucional hacia los pueblos indígenas del
Parlamento Chileno que cercena y no reconoce nuestros derechos.
En ese contexto, nuestras demandas puntuales para establecer dialogo real y soluciones concretas son las siguientes
1.- Derechos Territoriales.
a) Devolución del Territorio Mapuche desde el río Bíobío al Sur, a partir del reconocimiento explicito que el Estado hace sobre su existencia en el Tratado de Tapihue de (1825) Art. 19
b) Fin a los Mega- Proyectos dentro del Territorio Mapuche (represas, hidroeléctricas, carreteras, aeropuertos, mineras, forestales, pesqueras, vertederos, etc.) y todas aquellas instalaciones empresariales instaladas en Territorio Mapuche que contaminan nuestro medio ambiente.
2.- Derechos Político / Jurídico.
a) Derogación de la racista ley Nº 18.314 (antiterrorista) y todas aquellas leyes que afectan nuestra existencia como Pueblo, especialmente del ámbito de los recursos naturales (agua, aire,. ecosistemas, wigkul. etc.)
b) Libertad inmediata a todos los presos políticos Mapuche, encarcelados por recuperar nuestro territorio.
c) Indemnización a todos los presos políticos Mapuche y familiares de nuestros hermanos(a) asesinado y desaparecidos (clandestinos) en la lucha por la recuperación de nuestro territorio Mapuche desde 1990.
d) Desmilitarización del Territorio Mapuche en su totalidad. Es decir, retiro inmediato de la policía militar chilena del entorno de nuestras comunidades que cuidan los intereses de latifundistas y forestales.
e) Reconocimiento al derecho a la autonomía y la autodeterminación para la búsqueda de mecanismos de representación propia e interlocución con el Estado.
Finalmente, planteamos que para la materialización de estas demandas, nuestro planteamiento busca interlocución directa y urgente con la Jefe del Estado de Chile sin intermediario alguno que dificulte la adecuada búsqueda de mecanismos de solución a un conflicto que los Mapuche no iniciamos y del cual hoy somos victimas.
Juan Catrilanca Antil
Gizol Logko

Santiago, Julio 2011