miércoles, 11 de junio de 2014

IGNACIO Y LA INQUISICIÓN





IGNACIO Y LA INQUISICIÓN. COMUNISTAS E  IMPUNIDAD.

¡Cuánto habrá sufrido Ignacio Walker para decir lo que dijo en la entrevista a El Mercurio!
Lo que dijo sobre la transformación del Mineduc en un gestor inmobiliario tendría consecuencias políticas que el senador Walker no pudo haber desestimado: era una herejía en contra de los conceptos de los que manejan la  dogmática del gobierno de la Sra. Bachelet.
El solo hecho que se discrepe de ciertas aberraciones contenidas en los proyectos que se tramitan en el Congreso no es aceptable para los que están utilizando todos los medios a su alcance para impedir opiniones disidentes a lo que ellos piensan. US$ 5.000 millones para comprar establecimientos escolares es, evidentemente, una inversión cuya incidencia en la calidad de la educación no puede ser explicada racionalmente. Pero Ignacio debía formar parte del coro de los que si pensaban que esa inversión, o mejor dicho, esa invención, era indispensable para mejorar la calidad. Esta vez no aceptó ser utilizado como parte sumisa del coro. Dijo lo que dijo y lo reafirmó dos días después.
Una curiosa sensación de extrañeza me invadió: ¿Estaba la DC recuperando su autonomía, reencontrándose con su doctrina?
Fue más lejos, reafirmó que su partido hará las indicaciones necesarias a los proyectos del gobierno para proteger a la clase media de los efectos negativos que esos proyectos tienen. De paso, recordó que su partido es mayoritario en la Nueva Mayoría, es decir, no nos sigan ninguneando  porque sin nosotros no hay Nueva Mayoría.
Surge la pregunta sobre si estas afirmaciones han sido un arranque emocional del senador, o si representan una tendencia importante en la DC.. ¿Tiene respaldo Ignacio Walker para seguir siendo presidente de su partido?
Una primera respuesta la ha dado el senador Jorge Pizarro, descalificando a Walker: comenzaba a operar la Inquisición en contra del hereje, el senador Quintana, el diputado Andrade y la propia presidenta han prendido la hoguera para castigar a don Ignacio por tener la osadía de discrepar.
Por su parte el Partido Comunista también ha iniciado una campaña para criticar los proyectos del Ejecutivo en materia educacional. Pero lo hacen a su manera, sacan a sus huestes a las calles mientras los dirigentes contemplan complacientes como sus críticas no los transforman en herejes; mal que mal ellos están dirigiendo en pensamiento del gobierno.
Esta táctica la usaron durante el gobierno de González Videla; formando parte del gabinete ministerial, usaban la calle para atacar al gobierno.  El conflicto terminó con represiones y muerte de algunos subversivos. Los comunistas salieron del gobierno, González Videla logró la promulgación de la Ley de Defensa de la Democracia.
Los comunistas de hoy seguirán atacando al gobierno, pero en la más absoluta impunidad, Ignacio será quemado en la hoguera de la Inquisición por los totalistas.
Permítanme recordar unas líneas de un poema de García Lorca:
“Por las gradas sube Ignacio / con toda su muerte a cuestas. / Buscaba el amanecer, / y el amanecer no era”.

Julio Bazán A.