viernes, 24 de octubre de 2014

Carta a la Sra. Presidenta

Carta dirigida a la Presidenta:

Comunidades mapuche de Malleco anuncian proceso de demarcación territorial

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MICHELLE BACHELET JERIA
Presidenta de la Republica de Chile
Presente:
De nuestra consideración.
Las comunidades Mapuche abajo firmantes comunicamos a ud, y a su gobierno de la Nueva Mayoría que, los Mapuche hemos tomado la firme decisión de transitar hacia un proceso de implementación del derecho a la Libre determinación y la restitución de nuestro territorio usurpado.
El derecho Internacional mediante la Declaración de Naciones Unidas sobre los derechos de los Pueblos Indígenas ha establecido lo siguiente:
Los Pueblos Indígenas tienen el derecho a la Libre determinación. En virtud de ese derecho determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico social y cultural”.
Del mismo modo el derecho internacional sobre el derecho al territorio y sus recursos establece:
Los Pueblos Indígenas tienen derecho a la reparación, por medios que puedan incluir la restitución o, cuando ello no sea posible, una indemnización justa, imparcial y equitativa, por las tierras, los territorios y los recursos que tradicionalmente hayan poseído u ocupado o utilizado de otra forma y que hayan sido confiscados, tomados, ocupados, sin el consentimiento previo libre e informado.
Tanto el derecho a la Libre determinación Mapuche y el derecho al territorio implica un conjunto de acciones concretas de parte del Pueblo Mapuche. En este sentido anunciamos los siguientes:
I.- Que, comenzaremos un masivo proceso de Demarcación Territorial Mapuche, especialmente las tierras ancestrales del cual fuimos despojados mediante la fuerza y la violencia militar del Estado Chileno.
II.- La Demarcación Territorial, significa en términos prácticos que las comunidades comenzaran a tomar posesión de todas las tierras que nos pertenece legítimamente.
III.- Hacemos un llamado a todas las comunidades Mapuche del país a implementar un proceso de Demarcación Territorial e iniciar un proceso masivo de restitución y posesión material de las tierras que fueron usurpados.
Atentamente.
Comunidad Mapuche Coñomil Epuleo, Lof Kolliko.
Comunidad Mapuche Wente Wuinkul Mapu.
Comunidad Mapuche Temucuicui Autónoma.
Comunidad Mapuche Trangol de Victoria.
Comunidad Mapuche Mallekoche.
Comunidad Mapuche Rankilko.
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martes, 21 de octubre de 2014

Respaldo de Huenchumilla





Respaldo de Huenchumilla.

El día lunes 20 de octubre el Sr. Intendente de La Araucanía, en la reunión de ENAGRO afirmó que el problema de la región tenía carácter político; anunció, además, que el tema que se activaría sería el de la Autonomía.

Debo destacar que lo afirmado por el intendente es, ni más ni menos, lo sostenido, argumentado, respaldado jurídica e históricamente en este Blog.

Deseo dar a conocer el sentimiento de frustración vivido durante hace más de dos años, al no ver la reacción de los habitantes de la zona respecto de lo sostenido

¿Tenía que ser un representante de este gobierno quien abriera las puertas a este debate?

El gobierno anterior y sus representantes en diversos niveles se negaron sistemáticamente a conversar sobre lo que planteábamos.

El reconocimiento realizado por Francisco Huenchumilla puede tomar dos caminos: la utilización por la izquierda para sus propios fines de dominio total, o por nosotros para emplazar a los gobernantes a que se pronuncien si están o no de acuerdo con la emancipación, la autonomía y la soberanía territorial que son las aspiraciones que don Francisco avizora.

Julio Bazán A.

21 de octubre 2014.


martes, 7 de octubre de 2014

El Show de Espina IV



El Show de Espina IV
¿A cuales “territorios” ser refiere el senador?

Declaración del senador Espina en su página “web” (Abril de 2013): <<No es un misterio para nadie que el Estado chileno, a través de los procesos de reducción y radicación, ha confinado al pueblo Mapuche a vivir en un terreno de 500.000 hectáreas aproximadamente, en circunstancias que antes lo hacían en un terreno de 5 millones de hectáreas. Por lo mismo, yo invito a todos los chilenos a replantearse si realmente creemos que los alegatos del pueblo Mapuche no tienen fundamento alguno.>>
Mi contestación fue: (Abril de 2013) <<Afirmar que “no es un misterio para nadie” que señala en su escrito, es una frase que rechazo por insustancial e impropia, sin fundamento. ¿Quién se cree que es el senador para afirmar que “no es misterio para nadie” lo que él afirma, esto es bastante arrogante. Nadie puede, sin fundamentos, arrogarse la representación de todos los chilenos, Desde luego para mí y para los que piensan como yo, todo lo que afirma el senador es, a lo menos, muy impertinente.>>
¿Quién informó al senador lo de las 5.000.000 millones de hás. La región de La Araucanía tiene 32.000 kilómetros cuadrados, esto es, 3.200.000 de hás.
Otro cálculo:
De la “Comisión Títulos de Merced”, (Comisión de Verdad Histórica y Nuevo Trato):
<<Entre los años 1930 y 1972, las ventas de tierras de los Títulos de Merced fueron autorizadas por los Jueces de Indios, existiendo entre los años 1943 y 1947, un período en que no existieron restricciones para que los mapuche enajenaran las hijuelas resultantes de la división de estos títulos. Durante este período la pérdida de tierras mapuche fue considerable. En 1970 los abogados del Instituto de Desarrollo Indígena (IDI), calculaban en 100 mil hectáreas las tierras perdidas.>>
El Sr. Espina supone una deuda en tierras del Estado de Chile; sin aceptar el concepto de “deuda”, ¿a qué cantidades de hectáreas se ha referido el senador. Las 100.000 de la Comisión Aylwin calculadas por los abogados del Instituto de Desarrollo Indígena (IDI), de las 500.000 o de los 5.000.000 que el propio senador publica.
En algún momento el senador deberá explicar con claridad todas y cada una de sus afirmaciones sobre los territorios que él afirma que el Estado de Chile. O ¿espera que este tema sea definido por el “Aukiñ” que propone?
La política indígena de los gobiernos desde 1992 está determinada por un sistema de afirmaciones voluntaristas ordenadas a imponer un pensamiento indigenista que prescinde de la legalidad vigente y que, por lo tanto, destruye el Estado de Derecho. 
No se puede, en mi criterio, hacer afirmaciones respecto de cuyas fuentes  no se informa.

Julio Bazán A.
7 de octubre 2014.

P.S. Hoy hemos oído a funcionarios de gobierno atribuir a personas que, guiados por el afán de ganar dinero con la venta de madera, son los responsables de los camiones incendiados en los últimos días. La culpa, ahora, la tiene el lucro.

domingo, 5 de octubre de 2014

Rectificación




Rectificación

En el artículo “El Show de Espina III me refiero al “DL 2.598”, de decir DL 2.568”

JBA

sábado, 4 de octubre de 2014

El Show de Espina III



El Show de Espina III

Del documento del senador Espina:
<<…uno de cuyos mandatos será hacer un catastro y delimitar las tierras que el Estado de Chile debe al pueblo Mapuche. Para ello, deberá  oír las reivindicaciones territoriales de las comunidades y sus fundamentos históricos y legales; como asimismo de los agricultores, parceleros y emprendedores forestales, recopilará la información que juzgue necesario y determinará los límites que corresponda restituir.>>
Este tipo de afirmaciones son, precisamente, las que permiten a los indigenistas exigir territorios para el “Pueblo Nación Mapuche”. En efecto, el senador reconoce derechos “territoriales” sin dejar margen alguno para buscar y encontrar la verdad histórica y jurídica de las demandas indigenistas. Al decir “recopilará le información…y determinará los limites que corresponda restituir” (curiosa frase que no define el objeto cuyos limites  corresponda definir, un castellano que se ha paseado por las oficinas de los más importantes personajes de Chile) acepta implícitamente que hay que restituir, esto es, conforme a  las dos primeras acepciones de la RAE para restituir : . 1.-Volver algo a quien lo tenía antes.2.-. Restablecer o poner algo en el estado que antes tenía. Resulta que toda la evidencia histórica y jurídica no avala esta temeraria suposición del Sr. Espina. Pero la fuente de estas afirmaciones está en los documentos generados por la Concertación, tanto en el programa del Sr. Aylwin como en las legislaciones. La izquierda nacional e internacional se caracteriza por la reinvención de la historia., en este caso desconocen deliberadamente la existencia y los efectos del DL 2.568 siguiendo la línea de la Comisión Aylwiwn. Aceptar estas historias reinventadas con una facilidad que revela lo menos, falta de análisis y de seriedad y, a lo mas, intencionalidad torcida.
 Todo hace suponer que su fuente de información proviene de la “Comisión de Verdad Histórica y Nuevo Trato”, mamotreto que no creo que haya leído y que, si lo ha leído, no lo ha analizado. Esta comisión tenía un componente Premio Nacional de Historia, don Lautaro Núñez,  arqueólogo del norte; ni un solo historiador de la Academia Chilena de la Historia. El resto puros indigenistas ideologizados. En todo caso la comisión también la integró Felipe Larrain, ex ministro de Hacienda, quien emitió un lapidario informe de minoría sobre las distorsiones históricas contenidas en el Informe Final.
La realidad, por su parte, comienza a emplazar a Espina: la violencia en La Araucanía no solo no se aplaca, recrudece, se reafirma, se extiende, los camioneros han sido y son hoy las víctimas, pero a no equivocarse, los agricultores de toda la zona están comprendidos en las  demandas territoriales, los pequeños agricultores viven atemorizados, sino aterrorizados. Los grandes, al “aguaite” de lo que pasará.
Las autoridades califican la situación en La Araucanía de “conflicto social” como si fuera una huelga de los empleados fiscales pidiendo aumento de sueldo. Nada se le oye al Sr. Espina sobre esta definición, el está colaborando para el éxito del alcalde, el que preguntó si se detendría una toma mostrando un “papelito” (escritura de dominio) para evitar una toma, ¿será amenaza o advertencia? Doce años de parlamentario y no sabe nada de lo que realmente pasa en la zona que representa, o no quiere saberlo.
Dada la realidad que se está viviendo en la zona, cabe preguntar si de las 120 reuniones sostenidas con las “fuerzas vivas” se propuso siquiera una tregua en que participaran los indigenistas para encarar el problema de la paz en una ambiente pacífico.
Todo lo analizado puede derivar en reuniones entre los que están de acuerdo en casi todo, pero sin la concurrencia de quienes non están de acuerdo en renunciar a sus demandas de emancipación y autonomía, como se ha dicho en el artículo anterior de este análisis, no se logrará la paz deseada por todos.
El video de respaldo a Espina es de una ingenuidad angelical, sin sustancia:  “queremos la paz en La Araucanía”, ¡bravo! todos de acuerdo, viva Espina…sin evaluar que estaban siendo utilizados por un típico político.
Es necesario restablecer la verdad, tarea difícil por la infiltración conceptual y los supuestos falaces como los sostenidos en el documento de Espina, mas de veinte años de concientización orquestada y vociferada por los medios de comunicación, financiados por organismos extranjeros cuyos objetivos no se conocen. Si a esto sumamos la inercia, casi bovina, de dirigentes de la zona y el temor de sus representantes por el enorme poder político de la izquierda gobernante la tarea se dificulta.
Una reminiscencia histórica: los persas, amos del mundo, atacaron a los griegos. Sus fuerzas tenían una superioridad incalculable. Pero  trescientos espartanos comandados por Leónidas, detuvieron a los cientos de miles de persas en el paso de las Termópìlas, por su parte, Temístocles derrotó, en la batalla naval de Salamina,  a la poderosa armada persa con una flota sumamente inferior (480 A.C.).
Ni Leónidas ni Temístocles ni los espartanos se escudaron en su inferioridad numérica para salvar a Esparta y la soberanía de Grecia.
Julio Bazán A.
4 de octubre, 2014