Poner la bandera en la Catedral
La portada de El Mercurio del
día martes recién pasado un sonriente Arzobispo de Santiago se muestra
desplegando ante el altar de la Catedral de Santiago, una bandera, No se trata
de la bandera chilena. ¡Es la bandera del “pueblo mapuche”!
Primero, asombro e idignación,
luego una real admiración por el equipo comunicacional del equipo indigenista.
En los tiempos de Carlos V se
acuño el dicho “poner una pica en Flandes” para resaltar el éxito de alguna
acción, hoy yo digo poner la bandera en la Catedral. ¿Podría alguien imaginar algún acto
publicitario más contundente que tener a un Cardenal de la Iglesia católica
extendiendo la bandera de la autonomía de los indigenistas?
Ni la Coca Cola, ni Nike, podría
lograr este éxito comunicacional.
Mi opinión sobre la ignorancia
del Sr. Héctor Vargas, se minimiza al ver a este hombre de hablar sonriente y
vaticano, realiza un acto de incalculable trascendencia.
Tenemos derecho a preguntarnos, los
que somos católicos, si este mensaje está dirigido a las “ovejas” del rebaño
del siempre sonriente Ezzati. Las acciones de un Arzobispo, con los paramentos de su
rango eclesiástico y en la sede más importante de la Iglesia Católica, tapando
el altar en que se celebra el Sacramento de la Eucaristía.
¿Respalda la Iglesia Católica
las demandas indigenistas?
Y las repito, una vez más;
•
Emancipación del pueblo mapuche.
•
(emancipación, liberarse de cualquier clase de subordinación o dependencia.
rae)
•
Autonomía política.
•
Soberanía territorial.
•
Establecer un Estado Autónomo, del Pueblo Nación Mapuche..
Porque de esto se trata el
problema del llamado “conflicto mapuche”.
Que no se trate de utilizar la
enorme resonancia que la Iglesia
Católica tiene.
Tenemos derecho a preguntar si
poner una bandera en la catedral es una contestación simbólica a las demandas,
si es así es una obligación ética de la Iglesia explicar fudadamente el respaldo dado por el Cardenal..
El Sr. Ricardo Ezzati ¿acepta o
no las demandas indigenistas?
Julio Bazán A.
18 de agosto, 2016.