jueves, 19 de julio de 2018

Ojala no sea tarde.





Ojala no sea tarde.

<<“ya no hay medidas (que solicitar) son las que hay)   ¡que mas pueden hacer! Las de más intensidad son las que tengo yo” >> dice hoy en El Mercurio el agricultor de Vilcún a quien  asaltaron y quemaron bienes de su propiedad que le permitían cultivar las tierras su  fundo; ¿que más protección se puede tener que las que tenía Ashley Cooper y su familia que las que ellos tenían?
Esta frase es una definición exacta de lo que está ocurriendo en este mismo momento en La Araucanía una síntesis estupenda,  una frase escalofriante por lo serena y sintética precisión dicha en un momento tan doloroso.
Pero hay algo que hacer…para hacer lo hay que hacer, es necesario reemplazar las permanentes debilidades, el ocultamiento de la verdadera situación, de reconocer un diagnóstico realista de lo que ocurre en La Araucanía, tomar conciencia de lo que dice Cooper: ¡que más pueden hacer! “”Las de más intensidad son las que tengo yo” porque esto es, precisamente, el sentir generalizado en estas hermosas tierras. Nadie cree que haya soluciones, nadie espera nada, aburrimiento y desilusión cunden en hombres y mujeres.
¿Pensaran los del gobierno actual que están respondiendo a las expectativas que han generado? ¿Pensaran que las soluciones anunciadas son las que realmente resuelven el problema del terrorismo? ¿Qué la inversión en desarrollo económico, por si sola, es una espacie de mágica creación que traerá la paz las regiones del sur? ¡Cuan equivocados están!
La sincera alegría que hemos tenido al indicio de este gobierno se desvanece; el firme y enérgico discurso del Presidente cuando anunció el entrenamiento y apoyo material y logístico a la policía, la implementación de un sistema de inteligencia preventiva, no se avizoran porque todo sigue igual.
Que oigan a Cooper, que con fría claridad, afirma que todo se ha hecho, si pero se ha hecho mal. Un ejemplo patético ha sido la comisión del Sr. Héctor Vargas, Obispo de Temuco, transformadote en dócil y servil aval     del “Informe de Verdad Histórica y Nuevo Trato”, fuente del engaño sobre La Araucanía, sin considerar los signos que estaban a su vista para concluir lo que hoy un agricultor, víctima de nefastas políticas, define.
Si se quiere radicar la violencia desde sus raíces, revisen sus diagnósticos y tomen,  de una vez y urgentemente, la valiente decisión que se requiere.

Julio Bazán A.
19 de julio, 2018.



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